Dolor
Sentado a la vera del río observo el oleaje irregular. Manso, tranquilo, lánguido. En cada diminuta ola reposa parte del dolor que siento. Lo he diseminado en pequeñas partículas sobre el agua, así, no duele tanto. Vivo en una ciudad construida de dolor. Nadie le puede escapar, ni siquiera yo. Ni siquiera aquí, a la orilla del río, es posible huir. Nadie escapa. Nadie nunca escapó. Sin embargo yo necesito hacerlo.
De repente la paz reposa sobre el agua. El oleaje cesa. Corro desde la orilla y me lanzo al agua. Me hundo lentamente. No hay resistencia. Nada de pensamientos. En esos pocos segundos logro escuchar el sonido de la naturaleza. Luego ya nada. Abajo es todo oscuro y frío. El dolor lentamente desaparece, se filtra por mis poros y se diluye en el agua verdosa ¿Esto es morir?, pienso.
Ahora camino en la margen del río. Puedo observar las estrellas y tocarlas si quiero también. Saltar a la otra margen, o bien sumergirme nuevamente al fondo del río. Jugar con los peces, dormirme sobre una piedra o también nadar sin cansarme. Ya no hay límites. Y el oleaje nuevamente se vuelve irregular. Murmura. Vuelve al diálogo. Pero se siente distinto pues ya no hay dolor. El dolor quedó atrapado en las burbujas que aún recorren el río en dirección a la ciudad.
(Imagen: http://www.flickr.com/photos/richwarburton/52471135/ )
Es uno de los mejores textos que he leido tuyos...tiene tanto pero tanto para decir y sentir. Bien "errante"!!!, llegaste a mi yo de una y en eso ya sabes que soy muy terca...Beso "Mujer rebelde".
ResponderEliminarA veces es imposible huir de el dolor, lo más que podemos hacer es entregarnos a él, enfrentarlo y después sabe Dios que vendrá...
ResponderEliminarBesito en mejilla para ti Migue
@MUJER REBELDE:
ResponderEliminarBueno, ¡gracias! Llegar hasta el centro de una persona cuando lee algo que uno escribe es llegar a la meta. Me da mucho gusto leer esto.
Gracias.
Beso.
@ALE:
ResponderEliminarEL dolor es parte del juego de vivir esta vida y algo de lo cual no se puede escapar. Quiérase o no tarde o temprano termina atrapándonos y haciéndonos sentir su rigor.
Besote... en la mejilla ;)
@MUJER REBELDE:
ResponderEliminarRespondí tú comentario pero no quedó así que va de nuevo.
¡Gracias! gracias por un comentario tan sincero y directo. Llegar a que un lector diga que un texto escrito por mi le llegó mucho me pone muy feliz.
Besote =)
El dolor no hace distinciones, llega, hace su trabajo y al final, casi siempre marcha de puntillas. Besos!!!
ResponderEliminarAndo buscando gente con un perfil para invitarlas a que vean la invitación de mi blog... ¿dónde?
ResponderEliminarwww.tercerasalida.blogspot.com
A la espera...
Juan
hola, me he dado un paseo por tu blog y me gusta, Te invito, si te apetece a descubrir el mío recién estrenado, por si acaso pasa que te gusta.
ResponderEliminar@JUAN (Tercerasalida):
ResponderEliminarMe di una vuelta por tú blog y está muy bueno. Ahí me tenés como lector. Original diseño. Congratulations.
@MIS LARGOS PIES:
ResponderEliminarAnte todo bienvenida.
Lo he descubierto. Me gusta. Pasaré por allí. Prometido.