Encontré una carta que ella escribió a un hombre desconocido por mí.
Estaba en el cajón de su escritorio, justo ahí donde comienzan los secretos de su vida.
Tras leerla decidí robarle las palabras que terminaban diciendo:
No sé si me echas de menos… pero yo sí…
(Imagen:
http://www.flickr.com/photos/blueshade/4560168773/in/pool-35468132865@N01)
Tendremos todas a alguien que echamos de menos, parece.
ResponderEliminarBesitos Morocho.
Hola, perdón por escribirte por este medio, somos una red de librerías de usados www.buscaslibros.com y estamos recopilando información sobre blogs literarios para publicarlos en nuestra página. Ya hemos registrado tu blog para compartirlo con nuestros usuarios dentro de poco. Saludos y si buscas libros agotados, raros, etc, te esperamos por allá!
ResponderEliminarEs ficciòn ya se, pero hay momentos en la vida en que los cajones no hay que abrirlos , sobre todo si no son de uno. Las personas necesitan "su intimidad" por eso yo me enojè mucho cuando violaron la mìa . Pero a veces el compartir se confunde, pensamos que somos dueños de todo lo que es de la otra persona que es parte de la relaciòn y no aceptamos que algo no se nos diga. Muchas veces pensè que solemos hacer historias fantàsticas de objetos que se encuentran en lugares donde no se debiera tocar...yo siempre digo "Al que toca lo que no debe , le pasa lo que no quiere"...Beso "Mujer rebelde".(esto està escrito en base a una situaciòn vivida en una etapa de mi matrimonio, muy desagradable por cierto y que quizàs fue un detonante de lo que pasò despues.)
ResponderEliminar@CECY:
ResponderEliminarSí, eso es algo a lo que no le podemos huir...
Besos, morocha.
@BUSCAS LIBROS.COM
ResponderEliminarPues genial, bienvenida sea esa base de datos.
Saludos.
@MUJER REBELDE:
ResponderEliminarHay un dicho que dice "las reglas se hicieron para romperse" y supongo que es algo que por ser seres humanos se adapta a la perfección a nosotros. Las reglas se rompen y traen consecuencias. Los cajones se abren y pasa lo mismo.
Y comparto con vos eso de trasgredir los límites, de pensarnos que porque estamos con alguien somos dueños de su intimidad o sus mundos personales. Es todo un tema. Muy complejo por cierto.
Gracias por el aporte y la ilustración sobre lo que te sucedió en tú vida.
Beso!
Quizás la carta era para él mismo, que ya no se reconoce... y ella tampoco lo reconoce ya, por eso lo hecha de menos...
ResponderEliminarEl tiempo nos cambia... a algunos tanto que ya no podemos reconocerlos...
Muy buen post...!
Un beso